Por patagoniasur | 11 de agosto de 2017 | 0 comentarios
Pese a que su tradicional centro histórico reúne monumentos de gran interés, como ya vimos en este post sobre
Un día por las calles de Rota, la verdad es que pasar una jornada en la ciudad gaditana de Rota da la oportunidad de vivir otras muchas experiencias alejadas del turismo cultural más convencional.
Es imposible en este sentido pasar por alto los
16 km de playas que la ciudad costera ofrece al visitante, lugares en los que disfrutar del sol, el mar y de unos atardeceres difíciles de olvidar. La misma ciudad cuenta en su zona histórica con
playas tan reconocidas como como la del Chorrillo, la del Rompidillo y, especialmente, la de la Costilla. Todas ellas definidas por una paseo marítimo muy agradable de recorrer y con multitud de servicios al alcance como guinda del pastel a una jornada de paseo, playa y terrazas.
Ahora bien, el que busque un poco más de tranquilidad o unos alrededores naturales imposibles de disfrutar en el centro de la ciudad puede estar tranquilo ya que Rota también ofrece playas salvajes de indudable valor que tienen la particularidad de estar rodeadas en parte o totalmente por pinares.
Punta Candor es una de las playas más bonitas de la localidad. Foto: de @crisgarme (CC BY-SA 2.0).
La playa de Piedras Gordas es un ejemplo perfecto por sus dunas, aguas cristalinas y por estar rodeada de pinares. Con Punta Candor sucede lo mismo, aunque en esta se da la ocasión de conocer los Corrales de Rota. Esta construcción se presenta como una serie de delimitaciones del mar construida por los primeros pobladores romanos y usada hasta bien entrado el siglo XX para la pesca. Actualmente es un Monumento Natural y está considerado como una de las joyas históricas de la ciudad.
Sabores para aprovechar la ruta
Caminar, visitar monumentos o ir a la playa son actividades que pueden agotar a cualquier viajero. Para no dejarse nada atrás en esta ruta de una día por Rota, nada mejor que acudir a los muchos establecimientos que se abren en las calles de la ciudad para descubrir una gastronomía capaz de convertirse en un atractivo más de la visita.
Platos como el atún encebollado, la urta a la roteña o el arranque roteño así como su recuperada uva "tintilla" de Rota son especialidades que han cobrado forma de forma tradicional y que aún siguen sirviéndose en los restaurantes más encantadores de la ciudad.
La urta es un pescado típico de la costa gaditana que en Rota se prepara de una manera especial. Foto: urtas de Casa Emilio, en Rota.
Lugares ideales para descubrir los productos del mar que hacen famosa a la ciudad son restaurantes como Arrocería Ballena o Casa Emilio de Rota. Este último se ubica en la calle Mina y presenta una oferta de pescado fresco sacado del propio mercado del pueblo capaz de sorprender a cualquier comensal por exigente que sea.
La Retama
es un lugar especializado en frituras, mariscos y productos del mar en general que se ubica en la avenida Príncipe de España y que se cuenta entre uno de los más reconocidos de la ciudad.